NOTICIAS: 20.01.2021
Manuel Barragán ha puesto en marcha su nuevo proyecto personal ‘online’ ‘Quién dijo miedo’ para acercar la educación sanitaria libre de humos
Extremadura, Todos los días Manuel Barragán saca un rato para salir a pasear o a montar en bici cerca de la sierra de Navalvillar de Pela. Es su terapia diaria para mantener en forma cuerpo y mente. Cuando termina el recorrido mira el móvil y tiene decenas de mensajes en su teléfono particular y su Facebook personal. La mayoría son de pacientes, y casi todos tienen algo en común, son o han sido fumadores. La mayoría forma parte de la gran red que este médico especialista en tabaquismo ha tejido con el objetivo de ayudar a dejar de fumar a quien se lo proponga. Lo lleva haciendo años a través de los cursos de deshabituación tabáquica que imparte desde el Servicio Extremeño de Salud, antes de la pandemia de forma presencial en el Hospital Don Benito-Villanueva y ahora de forma virtual.
Sin embargo, Barragán ha querido ir más allá y ha creado un proyecto personal para bajar las cifras que hablan de que el tabaco sigue estando presente en la vida diaria de más del 40% de los extremeños «y nadie hace lo suficiente para evitarlo o remediarlo». De ahí que asegure que a nivel institucional no hay ningún plan oficial de abordaje del tabaquismo en la región «cuando todas las comunidades, menos la nuestra, cuentan con ello». Barragán afirma que aquí «no hay una norma que diga cómo tratar el tabaquismo y por tanto la gente no sabe que está enferma, e incluso muchos fumadores que quieren dejarlo no saben a dónde acudir».
Por eso, en su nuevo proyecto, este médico incluye a fumadores que quieren dejarlo, aquellos que no tienen intención, a no fumadores y a exfumadores. Todos tienen cabida porque lo que realmente quiere es acercar la educación sanitaria al usuario y crear en ellos hábitos saludables lejos de malos humos.
Hay en red más de 200 interesados de España y otros países como Cuba, donde más de la mitad quiere dejar el tabaco
Él ya lo hizo hace 27 años «sin método y sin ayuda, porque tampoco había, y a las bravas». Y asegura que es la mejor decisión que tomó, «al darme cuenta de que era una enfermedad, y lo es hoy en día a pesar de que desde el punto de vista sanitario muchos sigan sin considerarlo», dice.
Sin humos
Bajo el lema ‘Quién dijo miedo’, Barragán inició hace una semana unas sesiones virtuales a través de Facebook, como continuidad al anterior proyecto ‘Libre de humos’. «El nombre es un homenaje a mi amigo Urbano Vázquez, que lo usaba de máxima y que murió hace un mes por cáncer de pulmón». Era presidente de Somapaex, Sociedad de Médicos en Adicciones de Extremadura y especialmente preocupado por el daño ocasionado por el tabaco, recuerda.
Muchos de esos consumidores, ahora, en tiempos de otra pandemia, tienen grandes dificultades para abordar su problema. Por ello Barragán ha ideado unas terapias ‘online’ que puedan motivar para la deshabituación tabáquica. Hay en red más de 200 interesados de distintos puntos de España y también de otros países, como Cuba, donde más de la mitad ha manifestado que quiere dejar de fumar.
Pero este experto no está solo en la tarea; se ha rodeado de médicos y sanitarios de todas las especialidades, haciendo que el proyecto pase de lo personal a lo colectivo. Cuenta altruistamente con farmacéuticos, reumatólogos, neumólogos, cardiólogos, especialistas de medicina interna, psiquiatras, psicólogos clínicos y enfermeros. Algunos de ellos son responsables de asociaciones o comités de prevención del tabaquismo a nivel nacional y europeo. «Escribí un mensaje por WhatsApp a 70 amigos y compañeros médicos y en menos de 24 horas ya me habían contestado con un sí unos 50», explica.
La primera sesión contó con el director del Máster de Tabaquismo y profesor de Farmacología en la Universidad Cantabria, Francisco Javier Ayesta, quien habló sobre qué es el tabaquismo, los problemas de la persona fumadora o qué necesita para dejar de fumar. Además, dejó clara la posibilidad de que con ayuda profesional es más fácil conseguirlo.
Son conexiones de unos 15 minutos, que comienzan cada lunes a las 19.30 horas. En ellas, los especialistas hablan de forma práctica, didáctica y cercana al ciudadano, bajados del atril de profesor. «Eso sí, en ningún caso queremos que haya una idea de acoso al fumador, sino de educación para hacerle ver que, en un futuro, mejorando su salud, el principal beneficiario es uno mismo».
Seguidamente, Barragán desarrolla en directo el tema del día, y después hay una hora donde «es como una sala abierta con Zoom y Google Meet, donde se da la opción a los participantes a interaccionar».
Él, por su parte, se compromete con todos ellos a un seguimiento personalizado, anónimo y confidencial, adecuándoles su tratamiento en función de las necesidades, «con estudio previo y todas las garantías».
Para esta tarde, el tema previsto es ‘No todo es covid en tiempos de pandemia’, con la participación de la médico de familia y profesora en la Universidad de Zaragoza, Lourdes Clemente. No en vano, el especialista extremeño cree que el tabaquismo es también una pandemia, «aunque no sea una infección, el modelo de enfermedad es semejante, al ser prevalente, en muchos sitios a la vez y afecta en el mismo momento a muchas personas». Por eso, insiste, es necesario idear un plan sanitario concreto, con la participación de profesionales de diferentes especialidades.
Barragán también se queja de la publicidad que sigue transmitiendo el tabaco «sobre todo en muchas series, por ejemplo en Netflix, en las que se promociona el consumo», afirma. A pesar de todo, considera que el objetivo es llegar a los jóvenes «que son la generación sin humo, aunque sea a muy largo plazo, pero desnormalizando fumar, ya que la solución no está en prohibir sino en prevenir», concluye.
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