NOTICIAS: 20.03.2022
Las tecnologías ha pasado a jugar un papel fundamental en nuestra vida cotidiana. Aportan una gran comodidad, nos mantienen conectados e informados, y podemos hacerlo prácticamente todo de forma digital.
MADRID. A pesar de estos indudables beneficios, hemos llegado a un punto en el que nos hemos convertido en esclavos de nuestros dispositivos. Si vives pegado a tu teléfono móvil, puede que estés padeciendo una adicción. ¿Cómo identificar si estás haciendo un uso normal de smartphone o la cosa se está volviendo obsesiva? En la propia duda está la respuesta. Si crees que puedes ser adicto al móvil, es probablemente lo seas.
NOMOFOBIA, UN NUEVO TRASTORNO
Sales de casa, bajas en el ascensor y sales a la calle. De repente echas la mano al bolsillo y no notas el móvil, entonces comienzas a cachear el resto de la ropa, el bolso, la mochila, a la vez que experimentas sudores fríos y palpitaciones. ¿Te ha pasado? En este caso puede que sufras lo que se ha bautizado como ‘nomofobia’, que es el miedo irracional a no llevar el teléfono móvil. Es un trastorno psicológico tan reciente que todavía no consta en el Manual Diagnóstico y Estadístico de las Enfermedades Mentales, pero es más que probable que con el tiempo termine incluyéndose.
CONSULTAS COMPULSIVAS
Pero aún hay más señales. Si compruebas continuamente si tienes alguna notificación en redes sociales o alguna llamada, aunque realmente no estés esperando nada importante, puede ser signo de adicción. Incluso a veces puede pasar que encendemos la pantalla para mirar la hora, y luego ni nos hemos fijado, con lo que unos segundos después tenemos que volver a consultarlo para leer con atención la hora. Al final se convierte en un gesto casi compulsivo.
EL MÓVIL SIEMPRE CERCA
Otro signo de dependencia al móvil es el necesitar tenerlo siempre cerca, a mano o la vista, y cuando no es así, se puede llegar a sentir una sensación intensa de intranquilidad o incomodidad. Por ejemplo, tienes el smartphone encima de la mesa, al lado, en todo momento, para poder estar pendiente de si enciende la luz de notificaciones. O bien, necesitas notarlo en el bolsillo para asegurarte de que siempre está contigo, al alcance de la mano.
LO PRIMERO Y LO ÚLTIMO
Las personas adictas al dispositivo viven pegados a él, de forma que por las mañanas en cuanto se despiertan, lo primero que hacen es consultar el teléfono (mensajes, notificaciones, un poco de scroll en la red social preferida)… Y también es lo último que hacen al meterse en la cama antes de dormir. Hay que recordar que la luz azul que emiten estos aparatos, puede provocar trastornos en los ciclos del sueño.
VIBRACIÓN FANTASMA
Otro síntoma común y claro de dependencia tecnología es el hecho de experimentar la vibración o la llamada fantasma. Es esa sensación que todos hemos tenido alguna vez de que el móvil suena o vibra cuando en realidad no es así. Esto ocurre porque nuestra adicción al aparato nos mantienen en un constante estado de hipervigilancia, que cuando se prolonga puede provocar desgaste emocional, estrés y ansiedad.
DE WEB EN WEB
La forma en la que se consume información también puede ser un claro indicativo de que nuestra relación con lo digital se nos está yendo de las manos. Pasar de una web a otra, de link en link, para completar información, encontrar buenas ofertas, o estar a la última de todas las novedades, termina provocando una gran saturación mental por un exceso de estímulos e información. Además, genera cierta culpabilidad por esa sensación de que hemos perdido un montón de tiempo sin hacer realmente nada.
USO EN REUNIONES SOCIALES
Otro indicador serio de dependencia casi enfermiza es hacer uso del móvil en reuniones sociales. No es raro ver a grupos de personas, amigos o familia, tomando algo en torno a una mesa, y en vez de charlar y comunicarse con los demás, están abstraídos todos con su propio móvil. Si tú también lo has hecho, plantéate si la relación con tu smartphone es la adecuada.
APLAZAR TAREAS
Si te retrasas en tus obligaciones o pospones cosas importantes porque has consumido el tiempo mirando el móvil, puede que estés entrando en el terreno de la adicción y tengas problemas para concentrarte en las tareas del día a día. Incluso puede que veas una serie o una película manteniendo el móvil en la mano y echándole un ojo cada dos minutos. Ha llegado el momento de hacer algo para ponerle solución.
UTILIZAR UN BLOQUEADOR
Existen multitud de aplicaciones que se pueden instalar en el dispositivo móvil y que nos permiten llevar un control del uso que hacemos del mismo. Esto nos puede ayudar a ser consientes de la gravedad del problema, y del tiempo que perdemos ante la pantalla. Estas apps también ofrecen la opción de bloquear durante determinadas horas las webs que elijas, y las que más adictivas te resultan, para limitar las entradas que hacemos al día.
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